...A MI ÁNGEL DE LA GUARDA...

Este rincón, te lo dedico a ti, a mi ángel de la guarda, gracias por darme la oportunidad de tenerte en mente, gracias por hacerme reír en mis momentos tristes, gracias por hacerme olvidar mis momentos malos, gracias por acudir a mi, cada vez que te lo solicitaba, gracias por hacerme sentir el roce de tu piel, el olor de tu ser.
Se que no nos hemos conocido personalmente, pues cuándo yo llegué tu ya te habías ido, pero me brindaste la oportunidad de llevarte conmigo allá donde fuese.
Llevo mi nombre en honor al tuyo, Manolo, y eso me hace sentirme orgulloso de que tú, seas mi abuelo. De que tú me hayas elegido.
Hay momentos que creo que te olvidé, pero vuelves a mi, sin rencor, como tú solo sabes hacerlo.
¿Recuerdas cuando era pequeño y tenía miedo y solo pensando en ti, lograba dormirme?
¿Recuerdas cuando a solas, me susurrabas: Te quiero?
¿Recuerdas cuando lloraba, porque no te veía, pero me tranquilizaba saber que estabas ahí?
Hoy quiero hacerte saber que yo también lo recuerdo, todos los días y espero seguir recordándolo el resto de mi vida.
Gracias por hacerme ver, cual era mi destino, mi camino...
Ahora recordando, recuerdo el hormigueo que entraba en mi cuerpo de niño, cada vez que le pedía a la abuela, que me hablase de ti, de mi abuelo, de mi ángel protector, del padre de mi madre, de mi orgullo personal.
Quiero pedirte desde aquí, perdón, si te he fallado, si alguna vez te he defraudado, si alguna vez hice caso omiso, a lo que en mi oído me susurrabas...
No quiero dilatar más me mensaje, tu pequeño homenaje, espero que estés bien allá donde estés, que Dios te tenga en su regazo y que en paz descanses.
Nunca me olvidaré de ti y solo decirte que yo también te quiero, abuelo.